Será funcional cuando:
1- Sea para cubrir un muro: si se trata de un muro que tendrás que volver a pintar con el tiempo debes tener cuidado de no elegir un planta que se pegue o adhiera a la pared mediante raíces adventicios o ventosas, ya que ellas te dejarán marcas y manchas muy dificiles de quitar. Por el contrario, si la pared que buscas cubrir es de ladrillos o no vas a necesitar pintarla o retocarla luego, puedes colocar el tipo de enredaderas de las que hablabamos con anterioridad. Ejemplo de ellas son las hiedras, las enamoradas del muro y ampelopsis. También hay otro punto a tener en cuenta. Si quieres que la enredadera pierda las hojas en invierno para que el sol dé en la pared, una buena opción es la ampelosis. En contraposición, si quieres que permanezca todo el año con hojas, conviene que coloques hiedras o enamoradas del muro.
2- Sea para cubrir una pérgola: en este caso es fundamental tener en cuenta la velocidad o rapidez con la que quieres que la pérgola se cubra y si es que deseas que el sol pase por ella durante el invierno. Plantas ideales para ello son las glicinas, ya que crecen a gran velocidad formando sombra casi de forma inmediata. Otras plantas ideales son la bognonia rosada y los jazmines.
3- Sea para colocar en un alambrado: cuando quieres crear un límite bien tapado es ideal colocarlas. Sobre todo si se trata de un alambrado que no resulta decorativo. Para esta funcionalidad la elección debe apuntar a plantas de crecimiento denso y compacto, que no requieran de tutorado o un mantenimiento permanente y que formen un cerco como si fuera una pared. Hay enredaderas que presentan un gran defecto que es que crecen mucho en la parte superior y no tanto así en la inferior que queda casi desnuda. Por esta causa, es aconsejable que elijas plantas que si bien crezcan mas lento en su comienzo, con el tiempo cumplirán con su función a la perfección.
Será ornamental cuando:
1- Cuando las elijas por su floración y porque ella ocurra en una determinada época del año.
2- Cuando busques enredaderas y cubresuelos de un follaje colorido o atractivo que combine a la perfección con el resto de las plantas de tu jardín.
Otra de las formas para elegirlas es si quieres que sean de pleno sol, media sombra o sombra total; o bien para suelos secos, húmedos o anegadizos; ácidos, neutros o alcalinos.
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